Gabriela Vega es jubilada fue víctima de una estafa virtual a través de la red social Instagram. La mujer pretendía el reintegro de una compra que no había realizado, fue al Banco de Córdoba para realizar el reclamo y desde la entidad le recomendaron que lo realice a través de Instagram.
"Hice el reclamo en Banco de Córdoba, me ofreció una solución a mi problema y me dio una dirección de Instagram dónde yo podría hacer mi reclamo", cuenta Gabriela y sigue con su relato del mensaje que le llegó luego de ir al banco: "Un chat donde me ofrece una rebaja del 50% con tarjeta Cordobesa en todas las compras del mes". Si bien no hacía referencia al reclamo que había realizado, ella lo asoció directamente.
Fue en la red social donde vio una cuenta registrada como si fuera la de Bancor y entregó los datos de su tarjeta de crédito y terminó perdiendo (le robaron) $ 160.000 que tenía en su propia caja de ahorros. Además, los estafadores utilizaron la información para obtener un préstamo a nombre de Gabriela por más de $ 600.000. Es decir que la jubilada fue estafada por una cifra cercana a los $ 800.000.
La sospecha de la mujer es que fue una "entrega", ya que el mismo día que fue a realizar el reclamo personalmente, vio un posteo de una promoción del banco en su propia cuenta de Instagram y lo asoció al trámite que debía completar.
Vega indicó que no quería la promoción sino que sólo quería que le reintegren el dinero reclamado, "me dijo que le diera los datos, que me iba a ayudar. Le di los datos y automáticamente me hackearon la cuenta. Me robaron toda la jubilación, todo el saldo que tenía y me sacaron un crédito por $ 630.000 y lo transfirieon a otras cuentas. Todo lo hicieron en 10 minutos", describió la víctima de la estafa.
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