Adam Martin, un bombero de 41 años, fue operado a corazón abierto después de comer pochoclo.
El hombre sufrió una infección mortal causada por la comida que se quedó entre sus dientes y atacó su corazón.
La endocarditis ocurre cuando los gérmenes de otra parte de su cuerpo, como la boca, se propagan a través del torrente sanguíneo y dañan áreas del corazón. Esto es precisamente lo que le ocurrió a Martin, que reconoce que “nunca volveré a comer pochoclo, eso seguro”.
Una semana después, el hombre desarrolló lo que parecía ser un resfriado, que luego se convirtió en lo que se suponía que era gripe. Pasaban los días y la cosa no mejoraba así que, pasados unos días, decidió acudir a su médico de cabecera.
"Tendría que haber ido al dentista desde el primer momento. Entonces nada de esto habría sucedido. Ha sido la peor experiencia de mi vida”, admitió el hombre.
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