Uno de los sectores que más sufre la inactividad por la vigencia de la cuarentena sanitaria es el de los transportistas escolares. Sin clases presenciales, privados hasta el momento de realizar otros servicios de traslados y con los gastos impositivos y de servicios corriendo sin cesar, la fuente laboral de los transportistas está en serio riesgo, como la de otros sectores como los vinculados al turismo, viajes y hotelería.
Tras una reunión de los representantes del sector de transportistas escolares con el intendente de Córdoba, Martín Llaryora, surgieron una serie de medidas que, aunque no resuelven el fondo de la complicada problemática que atraviesan, representan una alivio ante la crisis.
La habilitación de “permisos ampliados de transporte para la realización de servicios esenciales y privados, sin tributar al municipio”, representa –aún con los límites que impone la menor actividad económica- una posibilidad de tomar trabajos hasta ahora vedados.
Otra de las disposiciones anunciadas por Llaryora consiste en “eximir las cuotas 3, 4 y 5 de la Patente de Transporte”, con el consecuente alivio en el costo fijo de cada transportista y la realización de “la Inspección Técnica Vehicular sin cargo”, ayudando en el mismo sentido.
El municipio también dispuso “prorrogar la vida útil del vehículo por un año más” y se comprometió a brindar la “asistencia social a las familias que así lo requieran”.
Fotos: Gero de Resa - Telefe Noticias - Telefe Córdoba
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