La extensión del aislamiento sanitario obligatorio más allá del 10 de mayo próximo genera preocupación en diversos sectores de la economía cordobesa, pero son distintos grupos de comerciantes quienes salieron a pedir la habilitación de la actividad.
Para reabrir sus negocios, reclaman que se autorice la adopción de medidas sanitarias similares a las de las grandes superficies que están trabajando, manteniendo el distanciamiento social, uso de tapabocas y extremando la desinfección de superficies.
Sin embargo, algunos también manifestaron su intención de abrir sus negocios en la zona céntrica, desde la semana próxima, desafiando la posible extensión de la cuarentena.
Una de las voces en tal sentido fue la de Tamara Sternberg, titular del Emporio del Libro, quien describió la crítica situación de un amplio grupo de comerciantes. “Con más de un mes y medio de inactividad no quedan reservas para afrontar los costos fijos; la ecuación es completamente deficitaria: no hay ingresos por ventas, pero hay que seguir pagando sueldos, alquileres, servicios e impuestos”, afirmó.
Sternberg aseguró que hay comerciantes que están dispuestos a reanudar las ventas con o sin autorización “porque en muchos casos la situación es insostenible y además vemos que grandes superficies cuyo funcionamiento está habilitado porque venden artículos esenciales también tienen la misma mercadería de los rubros que al resto de los comerciantes nos impiden vender”.
“También nos hemos asesorado legalmente sobre los aspectos que tornan inconstitucionales los decretos dictados por el Gobierno nacional”, afirmó la empresaria.
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