Cuando hablamos de Presbicia, hablamos de un proceso natural que forma parte del envejecimiento de las personas. Aunque varía el inicio de esta enfermedad por diferentes razones como la genética y el envejecimiento individual de cada uno, a partir de los 40, 45 años de edad suele aparecer. Pero hay una cuestión que no podemos evadir, y es nuestra nueva realidad de vida en pandemia, que nos impulsó el uso de diversas pantallas provocando en muchos casos que esta enfermedad aparezca en edades más tempranas a lo establecido biológicamente.
La presbicia sucede cuando el músculo pierde elasticidad, y en esta pandemia lo hemos sobre exigido. Al pasar tantas horas frente a pantallas, aceleramos este proceso de error refractivo a consecuencia de la acomodación del músculo y el cristalino pierde la elasticidad de adaptarse para ver de lejos y de cerca.
En Argentina casi 900 mil personas usan lentes por alguna disminución visual, pero el músculo no se corrige con anteojos. El principal tratamiento para solucionar esta falla en la visión provocada por la presbicia es quirúrgico. Las intervenciones con láser son la mejor alternativa para corregir la curvatura de la córnea. Se coloca un lente intraocular funcionando como un cristalino artificial sintético que permite recuperar el rango de distancias.
Para combatir la aparición temprana de la presbicia provocada por el excesivo uso de pantallas y dispositivos a toda hora y todo el tiempo, la Academia Americana de Oftalmología recomienda un ejercicio llamado 20-20-20. A los 20 minutos de fijación de vista en pantalla, alejar la mirada 20 pies (6 metros) y parpadear 20 veces.
Para saber más sobre presbicia, te invitamos a ver Salud en 3 Minutos con la participación del Dr. Santiago Onnis, Oftalmólogo del Instituto Onnis, quien nos explica en detalle todo lo que tenes que saber.
Para más información sobre presbicia podes ingresar en: www.onnisoftalmologia.com.ar ó comunicarte al 0351-420-2000
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