Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el sobrepeso y la obesidad infantil constituyen uno de los principales problemas de salud pública del siglo XXI. Se trata de una epidemia que, en los últimos años, se ha extendido a una velocidad alarmante. En Argentina, 4 de cada 10 niños, niñas y adolescentes tiene exceso de peso. Con la aparición del Coronavirus y la cuarentena, muchos especialistas hablan de que estamos viviendo un “choque de pandemias”
La obesidad es una enfermedad crónica, compleja y multifactorial que se establece por un desequilibrio entre la ingesta y el gasto energético, es decir entre las calorías que se consumen y las calorías que se gastan a través del ejercicio y de las actividades de la vida cotidiana, por lo que el cuerpo almacena el exceso de calorías en forma de grasa.
Los niños obesos y con sobrepeso tienen más probabilidades de padecer a edades más tempranas enfermedades no transmisibles como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
En la Argentina previa a la pandemia, 1 de cada 3 menores comenzaba la escuela primaria con sobrepeso. Esta situación empeora el rendimiento escolar, trae dificultades motrices, problemas de autoestima y es a futuro causa de enfermedades crónicas no transmisibles, que son la primera causa de muerte en el mundo
Es sumamente importante conocer esta problemática de Salud Pública, y empezar a abordarla. Por eso en “Salud en 3 Minutos” consultamos sobre este tema con la Lic. María José Cacciavillani, Nutricionista Especialista en Obesidad Infantil de “Nutriser”.
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