Desde el 2015 en Argentina contamos con la Ley de “Parto Respetado” o “Parto Humanizado”. Esta es una Ley que implica generar un espacio familiar donde la mamá y el recién nacido sean los protagonistas, y donde el nacimiento se desarrolle de la manera más natural posible. La Ley le otorga a la mamá el derecho a decidir la forma de controlar el dolor durante el parto y a que respeten sus tiempos sin acelerar ningún proceso, le permite a la mujer seguir su propio pulso de parto evitando todo tipo de intervenciones innecesarias.
El parto respetado se fundamenta en la valoración del mundo afectivo y emocional de las personas, donde cada intervención del sistema de salud impacta de manera diferente en cada mujer, quien necesita de la ayuda, acompañamiento y cuidado de un equipo profesional idóneo, con la tecnología adecuada, en un ambiente cálido y afectuoso en el que las prácticas sean acordes a los avances de la ciencia y también a la perspectiva de derechos que permitan su protagonismo.
El equipo de profesionales debe respetar sus deseos, sus opiniones, su cultura, su cuerpo, sus temores y sus tiempos, ofreciendo herramientas que contribuyan a la relajación durante el trabajo de parto como por ejemplo la existencia de duchas para relajarse, baños de inmersión, masajes, pelotas para esferodinamia, la posibilidad de parir en un banco de parto, entre otros elementos.
Para saber todo lo que implica la Ley 25.929 de “Parto Respetado” y poder hacer valer este derecho, les invitamos a ver “Salud en 3 Minutos” con la presencia de la Dra. Mariana Roggero, Ginecóloga y Obstetra impulsora de las “Salas mínimamente respetadas” en la Clínica Reina Fabiola y docente de la Universidad Católica de Córdoba, quien nos cuenta la importancia de esta ley y el derecho con el que cuentan todas las familias que se encuentran esperando la llegada de un bebé.
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