Las medidas nacionales fueron recibidas de manera dispar, desde los diversos sectores que conforman a la sociedad. En Córdoba, alguno sectores esperaban que las medidas anunciadas nos alcancen de manera directa, sin depender de la decisión provincial, mientras que otros ya habían manifestado que no iban a estar dispuestos a mantener una cuarentena estricta.
Los médicos terapistas por su parte, consideraron lógico que las medidas sean diferenciadas en AMBA, con respecto al resto del país. Andrés Peñaloza, presidente de la Sociedad de Terapia Intensiva de Córdoba, expresó: "Como nosotros todavía no estamos en una situación parecida, es de esperar que se puedan tomar medidas distintas". En este sentido, se refirió a la potestad que tiene el gobierno provincial de ordenar restricciones, acorde a la disponibilidad de camas críticas con las que cuenta el sistema de salud, como indicador para analizar medidas restrictivas.
En este sentido, afirman que Córdoba aún no llega al nivel de saturación de Buenos Aires y que, de llegar al 60% de ocupación de camas críticas, deberían aplicar más restricciones.
Pero otra de las variables, es el análisis del personal de salud para atender esas camas críticas. En este sentido, Peñaloza señaló: "en un año la cantidad de terapistas no ha cambiado y es imposible pensar que ahora contamos con un pool de 700, 800 terapistas, más para atender las 3700 camas que aspiran tener ya en funcionamiento".
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