"Yo soy liceista. Cuando se cumple este aniversario, vienen al recuerdo las vivencias de esa época y de años atrás. Antes, el Liceo era de carácter interno solamente: se entraba un domingo a las 22 y se salía el viernes al mediodía", dijo el coronel Francisco Conde, director del Liceo.
Si bien en un primer momento la institución era exclusivamente para hombres y con una formación marcada por el entrenamiento militar, esto cambió en los últimos años.
"La actual abanderada es una mujer y tenemos varias egresadas. La tendencia de los egresados a hacer carrera militar ha mermado. Si bien la intención era esa, nunca fue masiva la concurrencia. De mis compañeros, la mayoría no siguieron la carrera militar", contó Conde quien además afirmó que los chicos egresan con el título de Bachiller con orientación en Ciencias Económicas o Naturales y como Brigadier de arma de artillería.
Actualmente, solo quedan 70 alumnos que tienen una modalidad de internado y sólo son hombres.
"A partir del año que viene, vamos a cambiar las instalaciones para que también puedan incorporarse cadetes mujeres", afirmó.
Los alumnos sólo tienen entrenamiento militar los miércoles a la tarde y el resto de los días cursan diferentes materias como en todos las escuelas que son dictadas por personal civil.
"También tenemos la posibilidad de enviar algunos alumnos a hacer cursos a otras ciudades como Buenos Aires y Comodoro Rivadavia".
Una de las tradiciones que sí se han mantenido a lo largo del tiempo es el respeto por el uniforme y la entrega de un sable corto a los alumnos de los últimos años.
"Para nosotros el uniforme es una carta de presentación y esto implica que la persona debe mostrar normas de urbanidad y buenas costumbres", expresó.
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