La niña embarazada llegó derivada desde otro centro asistencia al hospital de José Ignacio Díaz. El alto riesgo del parto llevó a los médicos a practicarle una cesárea, lo que contribuyó a que el alumbramiento no tuviera incidentes.
Fuentes del nosocomio público señalaron que la mamá se encuentra estable pero con respiración asistida ; agregan que el recién nacido no estaría contagiado.
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