El Frente de Todos es una coalición que tiene varias partes y sectores. Algunos más duros y fieles al kirchnerismo "original" que son los cercanos a Cristina, otros sectores más moderados que están alineados con el presidente Alberto Fernández y también los que se encolumnan detrás de Sergio Massa.
En ese sentido podría enmarcarse los cruces de las últimas horas dentro del frente oficialista. "El presidente se ve obligado a hacer un equilibrio importante ante esas fuerzas que coinciden en objetivos generales, pero que no coinciden muchas veces en los modos, los formatos y los actores que se seleccionan para llevar adelantes las políticas", indica el especialista político Ignacio Liendo.
El detonante de estos "chispazos" fue la crítica de Hebe de Bonafini a Fernández y la carta con la que el presidente le contesta a la titular de Madres de Plaza de Mayo, una férrea defensora de la actual vice presidenta.
"Claramente lo que estamos observando es cómo se manifiesta la tensión interna entre el rumbo que quisieron imprimirle uno de los sectores del Frente de todos que lo dirige la vice presidenta, que tiene muy claro cuáles son las ideas respecto de cuál debe ser el rumbro del gobierno", cierra Liendo.
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